lunes, 6 de agosto de 2018

Gloria y loor...


Gloria y loor…


Eduardo de la Serna



Desde que yo era chico mi papá trabajaba en “la construcción”. Tenía una pequeña empresa de pisos industriales. Empresa que pasó por los distintos vaivenes económicos de la realidad del país, y otros temas varios (estafas incluidas, que no vienen aquí al caso). La empresa de mi viejo era chica, habitualmente era sub contratada. Una empresa importante ganaba una licitación de X cosa y llamaba para los pisos a la empresa de mi viejo. Así fue sobreviviendo. Incluso creo que pusieron pisos a todas las más grandes empresas del país.
Pero yo recuerdo de adolescente un día una conversación acerca del tema “coimas” (y – por lo que recuerdo – se refería a algo “entre empresas”, no tengo conciencia de que hayan trabajado para el Estado, al menos directamente). Lo hablaba con un amigo cura, más tarde obispo: ¿cómo hago? Si no doy coima no gano ni una licitación y tengo que cerrar. No quiero darla, pero no me queda más remedio… No sé cómo, ni cuánto, ni a quienes, sí sé que eso ocurrió.

No me extraña, entonces, que el tema coimas aparezca y reaparezca. Y me imagino que, si el tema se investiga en serio y a fondo, creo que habría que cerrar el país (o casi). La virgen de Luján “se quedó” en la zona porque el que la transportaba fue por otro camino para pagar un soborno al jefe de la aduana. El puerto de Buenos Aires, y el Virreinato, se gestaron para contrabando y sobornos y llevar lo “saqueado” más directamente a España. El puerto (“porteños”) fue el centro de la red de ferrocarriles para llevar tanino y maderas a Londres y además ser “el mercado del mundo”. Los préstamos, desde el de Baring Brothers tenían el “porcentaje” que corresponde a las “gestiones” tan patrióticas… y así hasta Caputo.

No me extraña, repito. Aunque no entiendo por qué cuando Cristina propuso una investigación seria de toda la obra pública desde el 2003 a la fecha, el actual gobierno se negó, y ahora exhibe impúdico unas fotocopias que, en lo personal, me resultan totalmente increíbles. Repito: estoy seguro que hubo sobornos, aunque no sepa quiénes, cuándo ni cómo, pero viendo “el paño” (los “fantoches” del poder judicial a cargo, por ejemplo) creo que no le daré crédito ni aunque haya condenas firmes. Sería como creerle al juez Moro o la jueza Camacho.

Como creo que no habrá una investigación seria y a fondo, coincido que se trata de una cortina de humo, que es circo, ya que no hay pan, y que es una tapadera de los escándalos que salpicaban a la inmaculada concepción de Magnetto. Es aquello del pastorcito mentiroso… una vez más (creo que la centésima, más o menos).


Foto tomada de http://elcalderodelasabiduria.blogspot.com/2013/02/el-pastorcillo-mentiroso.html

2 comentarios:

  1. Sabes quë...no escondas la cabeza como el avestruz y mires la realidad desde una sola vereda...porque de la misma forma que analizás la realidad política...yo también siguiendo tu postura... diría que todos los curas o sacerdotes que tienen "Poder" en este momento... son todos unos violadores y corruptos...(y te voy avisando que no vote a este gobierno)

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    1. Si escondiera la cabeza (y de paso te aviso que no es cierto que el avestruz lo haga) no lo publicaría en mi blog. Que miro desde una mirada parcial, no lo dudes. todos lo hacemos. Tenés todo el derecho del mundo a pensar distinto (y por eso autorizo la publicación de tu texto aunque no coincida), y yo el de pensar distinto a vos. Lo otro, lo de los curas violadores y corruptos no toiene nada que ver.

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