jueves, 29 de mayo de 2025

Jasón, el hospitalario

Jasón, el hospitalario

Eduardo de la Serna




Antes de comenzar señalemos que el nombre Jasón es relativamente frecuente en el mundo griego y, por lo tanto, cuando el judaísmo y el helenismo entran en contacto, es decir, en los últimos libros de la Biblia hebrea, encontramos varios personajes con ese nombre. Un ejemplo es el cruel y perverso sumo sacerdote, responsable de masacres e impurezas, de quien se narran sus atrocidades en 2 Macabeos 4,7-5,7. Pero aquí queremos referirnos a un Jasón de quién se habla en Hechos de los Apóstoles 17 en la misión de Pablo en Tesalónica. Señalemos, de paso, que vuelve a nombrarse un Jasón en Romanos 16,21 que podría ser el mismo. Si este es el caso, se habría trasladado a Corinto (poco más de 500 kms.) y Pablo, a él y a otros, los llama “congéneres”, o parientes; pero no tenemos más datos como para afirmarlo con claridad. Veamos entonces qué sabemos de Jasón en Tesalónica.

Notemos que en Hechos es frecuente el siguiente esquema: Pablo llega a una ciudad y predica en la sinagoga a los judíos. Allí algunos pocos reciben el mensaje, pero otros lo rechazan y buscan aliados (judíos o no judíos) para confrontar con él. Pablo, entonces, comienza a dirigir la predicación a los paganos. Así, unos pocos judíos y varios paganos van conformando una comunidad. Pero el conflicto escala en intensidad y Pablo debe dejar la ciudad y dirigirse a otra. Esto es lo que ocurrirá también en Tesalónica (17,1-10).

En este caso, cuando se provoca a la multitud con tumultos y alboroto, las autoridades judiciales de la ciudad deben tomar medidas. Van a buscar a Pablo (y a su compañero Silas, que también es llamado Silvano) pero no lo encuentran. Es aquí que entra en escena Jasón.

En las ciudades donde iba Pablo solía alojarse en el “barrio de los tejedores” o "talabarteros" ya que trabajaba haciendo y reparando tiendas. Siendo que, en este caso, se alberga en casa de Jasón es probable que él también tuviera este oficio. El texto habla de “Jasón y los hermanos” (v.6), es decir, se trata de un cristiano. Sabiendo lo que podría ocurrir, “los hermanos”, de noche, sacan a Pablo de la ciudad (v.10), entonces el que debe hacerse responsable de todo el conflicto es Jasón, quien es tenido como cómplice por haberlos hospedado (v.7). Además, tanto Pablo como “ellos” (por lo tanto, Jasón y los hermanos) predican que hay “otro rey” (v.7), es decir, algo subversivo en el Imperio ya que afirman que el rey no es “el César” (v.6). Pero los encargados judiciales de la situación no parecen haber visto que la cosa fuera grave (seguramente porque Pablo y Silas ya no están en la ciudad) y se conforman con una garantía que Jasón les da; probablemente de que no van a volver a la ciudad (o que no va a volver a alojarlos).  

Pero Jasón no sólo lo ha recibido, sino que además ha predicado algo que resulta conflictivo en el imperio romano. Y, para peor, “da la cara” por Pablo haciéndose cargo de la situación.

Hospitalidad, discipulado y solidaridad parecen características fundamentales del seguimiento de Jesús por parte de Jasón. 

  • La hospitalidad es una característica de suma importancia en el mundo antiguo (especialmente para los nómadas y en el desierto) y es muy mal visto no serlo. Jesús mismo es alojado hospitalariamente en más de una ocasión (ver Lc 10,38); y si bien es cierto que la situación podía prestarse a excesos, los primeros cristianos dieron mucha importancia a esta virtud. Jasón lo recibe.
  • Jasón, como Pablo, a su vez, predica un evangelio “peligroso”: decir que hay “otro rey” es anunciar algo en contra del Emperador, y eso es muy mal visto en el Imperio romano; pero la predicación no puede “licuarse” para no caer mal o no ser perseguidos. Jasón no lo hace. 
  • Y a su vez Jasón se arriesga solidariamente, “da la cara” por Pablo (se ocupa de sacarlo a escondidas de la ciudad y sale de garante) comprometiéndose en la causa del Evangelio. En realidad, el proyecto de Jesús no es de “medias tintas”, o de “tibios”. Jasón no lo es.


Imagen tomada de https://www.iscrdonbosco.org/blog/la-hospitalidad-en-la-biblia/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Cualquiera puede comentar y no será eliminado, aunque no este de acuerdo con lo dicho, siempre que sea respetuoso (caso contrario, será borrado). Pero habitualmente no responderé los comentarios, ni unos ni otros, para no transformar este blog en un foro. De todos modos, podrán expresar su opinión.