Estar junto al Pueblo
Curas opp. (regional
Carlos Mugica)
Cuando el 11 de mayo de 1974 la
vida de Carlos Mugica se apagaba, fruto de las balas asesinas de la Triple A,
todo fue un torbellino. Amigas y amigos corrieron al hospital Salaberri, otros
y otras a la parroquia San Francisco Solano, la mayoría sin entender qué pasaba
y, mucho menos, qué iba a ocurrir. Entre esos murmullos circuló con el tiempo
que Carlos había dicho: “ahora más que nunca hay que estar junto al Pueblo”.
No hay forma de atestiguar con seguridad el dicho, pero los conocidos de Carlos
siempre aseguraron que, si él no lo pronunció, el dicho era totalmente
coherente con su actitud frente a la vida y frente al Pueblo.
Como curas en opción por los
pobres, en un nuevo aniversario del crimen, repetimos que es tiempo de “estar
junto al Pueblo”. Estar junto a las víctimas de la pandemia neoliberal,
cuyas consecuencias durarán años o décadas, y junto a las víctimas de la
pandemia del Covid. Porque más allá de la salud, que es preocupante, sabemos la
repercusión que la situación provoca especialmente en los más pobres.
Precisamente aquellos a los que la otra pandemia desprotegió sistemáticamente.
Estar junto al Pueblo es estar
del lado de la vida, amenazada por la salud negada, por el pan escaso, por el
trabajo desvalorado y mal pagado, por la justicia negada o ausente, por la
verdad escondida. Estar junto al Pueblo es cuidar a las niñas y niños a las que
algunos impunes presionan por la presencialidad escolar, y a las y los docentes
amenazados en el mismo contexto. Estar junto al Pueblo es celebrar cada vacuna
que llega y se distribuye en los barrios. Estar junto al Pueblo es susurrar la
verdad ante tanta mentira omnipresente en los medios hegemónicos. Estar junto
al Pueblo es celebrar las políticas de cuidado, de unidad latinoamericana, de
integración.
Pero también estar junto al Pueblo
es reclamar independencia frente a los poderes externos o internos cómplices;
es exigir un poder judicial que haga justicia, y no campaña política en favor
de su candidato; es exigir que no haya en nuestra patria presas y presos
políticos; es pedir que los medios de comunicación que mienten sean
sancionados, al menos retirándoseles la pauta publicitaria; es pedir que el
comercio que circula por la conocida como “hidrovía” sea manejado por el
Estado, no por el capital extranjero; es demandar que la salud no sea solamente
la aportada por las vacunas, sino también contra los agrotóxicos, la minería
ilegal o inmoral, el desmonte y la contaminación; es pedir que las
comunicaciones sean tenidas como un derecho esencial; estar junto al Pueblo es
aprender a mirar “desde el Pueblo” y no desde los escritorios; es ser
total e incuestionablemente solidarios con su hambre y su dolor, con sus
alegrías y tristezas, con todo aquello que al Pueblo lo mueve y conmueve ante
la vida y la muerte. Porque creemos que “Pueblo es el que no oprime y lucha
contra la opresión”, como decía el beato mártir Enrique Angelelli.
Estar junto al Pueblo es un
imperativo para nosotros, los curas, pero esperamos que también lo sea para
todas y todos aquellos que reivindican las banderas de la justicia social,
soberanía política y libertad económica. Para que sea el Pueblo quien nos mire
a los ojos y nos diga, como le decían a Carlos: “usted habla por nosotros”.
Así, su sangre derramada hace 47 años nos limpiará los ojos para ver, nos
señalará el camino para andar y nos fortalecerá los músculos para reconocer al
antipueblo y celebrar el encuentro y la mesa con las compañeras y compañeros.
Foto tomada de https://www.baraderoteinforma.com.ar/se-cumplen-hoy-41-anos-del-asesinato-del-padre-carlos-mugica/
Eduardo! Mandeme un mje al 11- 39187673 asi hacemos para hoy a la noche una nota sobre el Padre Mujica x favor. Fede de Radio San Francisco
ResponderBorrarLo siento... lo vi muy tarde
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