Límites de Dilexi Te
Eduardo de la Serna
Como ya se ha dicho abundantemente y se ha comentado, el Papa León XIV ha
publicado su primera exhortación apostólica, Dilexi Te, dedicada al amor a los
pobres. La frase, “te
he amado” (egō ēgápēsá se; Apocalipsis 3,9) la dirige el Papa a los pobres. El
texto bíblico dice otra cosa: se dirige a la comunidad de Filadelfia en
momentos críticos, algunos son perseguidos, pero tienen una puerta siempre
abierta ante Dios. No habla de los pobres. Lamentablemente, desde hace muchos
años, el uso de la Biblia en los documentos vaticanos no suele seguir las
indicaciones que el mismo Vaticano ha señalado.
Pero mirando la Exhortación, y habiendo ya
señalado en otra ocasión sus muchos aspectos positivos, quiero detenerme en
otros puntos.
- Para comenzar, pareciera que el amor a los pobres es exclusivamente “de
la Iglesia”, y dentro de la Iglesia, exclusivamente de los sectores “jerárquicos”.
El laicado está absolutamente ausente.
- Destaca la importancia que la Iglesia ha dado, por ejemplo, a la salud
de los pobres, la educación de los pobres, pero no hay ninguna referencia al a educación
pública o la salud pública.
- El mundo indígena y el mundo afro también están ausentes (y, el
primero, es particularmente llamativo dada la autoproclamada actividad pastoral
del Papa en Perú; #89).
- Citando al Papa Francisco, hace suya la sentencia:
«la
organización de las sociedades en todo el mundo todavía está lejos de reflejar
con claridad que las mujeres tienen exactamente la misma dignidad e idénticos
derechos que los varones. Se afirma algo con las palabras, pero las decisiones
y la realidad gritan otro mensaje» (#12),
·
pero pareciera que la Iglesia no forma parte de
esas “sociedades” ya que “la misma dignidad e idénticos derechos” no ocurren en
su seno.
- La importancia de la Política en la búsqueda de una mayor justicia para los pobres (y las pobres) no se destaca con la claridad y contundencia con que lo hacía el Papa Francisco.
- El Papa no ignora (y lo señala) que la pobreza, la vida (y muerte) de los y las pobres es algo causado. Son efectos de una causa; sin embargo, puede extrañarse una mirada más precisa de esas causas. Por ejemplo, las consecuencias de las guerras no se destacan, y palabras como “deuda” están ausentes en el texto. Si bien – citando a Francisco – menciona el “imperio del dinero”, el imperialismo está ausente, y la palabra “colonia” no se encuentra jamás…
Valgan estos ejemplos, que
podrían ampliarse, para señalar límites de una buena Exhortación Apostólica.
Limites señalados, no por afán de crítica, sino para que el amor a los pobres
sea siempre una utopía, como lo es el reinado de Dios, hacia el que tender cada
vez con mayor dedicación, compromiso y militancia.
Imagen tomada de https://www.religiondigital.org/vaticano/dilexi-te-pobres-Leon-XIV-Francisco-Iglesia-legado-injusticia-mujer-pobreza-desigualdad-esclavitud-cristianos-limosna_0_2823617618.html
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Cualquiera puede comentar y no será eliminado, aunque no este de acuerdo con lo dicho, siempre que sea respetuoso (caso contrario, será borrado). Pero habitualmente no responderé los comentarios, ni unos ni otros, para no transformar este blog en un foro. De todos modos, podrán expresar su opinión.